Monumento "El Caballito"

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Datos

Época
1992

Escultura El Caballito Sebastián.jpg

Alcaldía
Dirección
Calle de Tacuba 5, Centro Histórico de la Cdad. de México, Centro, Cuauhtémoc, 06000 Ciudad de México, CDMX
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Coordenadas
19° 26' 10.21" N, 99° 8' 22.09" W

El Monumento "El Caballito" está ubicado en la Colonia Centro - Centro Histórico en la Alcaldía Cuauhtémoc en la Ciudad de México. “El Caballito” es uno de los monumentos más emblemáticos de la Ciudad de México.

Historia[editar | editar código]

El Monumento "El Caballito" se inauguró el 15 de enero de 1992 para sustituir a "El Caballito" de Manuel Tolsá que hoy en día se encuentra afuera del Palacio de Minería.

Para el artista, Sebastián (Enrique Carbajal) significó todo un reto. Para el artista era significativo reemplazar la emblemática obra de Manuel Toslá, por lo que decidió hacer un paralelo en el concepto plástico. Contaba en una entrevista a Procesoen1991, que la estatua de Carlos IV “significaba la conquista, la dominación, y eso no me gusta: el caballo de Carlos IV está pisando el símbolo de las armas prehispánicas, un carcaj, el escudo con las lanzas.” Por lo que su obra, no está pisando nada, no tiene jinete y sólo es la evocación de la cabeza del animal. La escultura inaugurada en enero de 1992 ha desatado polémica desde ese día. Es uno de los monumentos referentes de la capital del país, pero no es del gusto de todas las personas que lo ven. Profesa el dicho que cada cabeza es un mundo y cada opinión es válida.[1]

Ante la falta de presupuesto, se realizaron corridas de toros para poder llevar a cabo la obra. Con tales espectáculos lograron recaudar 50 mil pesos más de los 18,700 pesos que requería para la escultura. El Caballito fue colocada en el Zócalo, pero tras la guerra de Independencia y por sus antecedentes con la corona española se movió al claustro de la Universidad, en aquel entonces situada donde hoy se levanta el edificio de la Suprema Corte de Justicia.

Mariano Arista decidió darle vida y belleza al Paseo de Bucareli por lo que la famosa obra ecuestre llegó a la glorieta de Reforma. En mayo de 1979, se encontró el lugar ideal para que reposara permanentemente. La obra fue colocada en la calle de Tacuba frente al Palacio de Minería en la plaza que lleva el nombre de su creador.

Caballito Monumento.jpg


De regreso a la “Cabeza de caballo amarilla de Reforma”[editar | editar código]

Con el rápido crecimiento de la Ciudad de México, se creó un drenaje profundo que requería de un respiradero, pero que no afectara negativamente la imagen del paseo de la Reforma. La solución vino de la mano del escultor chihuahuense Enrique Carbajal, mejor conocido como Sebastián.

El encargo de Max Hadad, dueño del edificio identificado como “El Caballito”, era simple, quería una escultura monumental que reemplazará a El Caballito de Tolsá y que funcionara como respiradero. Las limitaciones eran que la escultura fuera cilíndrica de 28 metros de alto por 10 de diámetro para disipar con facilidad los vapores del drenaje profundo.

Para Sebastián significó todo un reto, para el artista era significativo reemplazar la emblemática obra de Manuel Toslá, por lo que decidió hacer un paralelo en el concepto plástico. Contaba en una entrevista a Proceso en 1991, que la estatua de Carlos IV “significaba la conquista, la dominación, y eso no me gusta: el caballo de Carlos IV está pisando el símbolo de las armas prehispánicas, un carcaj, el escudo con las lanzas.” Por lo que su obra, no está pisando nada, no tiene jinete y sólo es la evocación de la cabeza del animal.[2]

Arquitectura[editar | editar código]

“El Caballito siempre será amarillo”, afirmó el escultor Sebastián al referir que el color blanco que lució en días pasados fue parte de una intervención que se le hizo para remozar el tono original dañado por el sol y la concentración de gases tóxicos de su alrededor. La escultura ya recobró el tono brillante que la identifica, y su estado es estable. En entrevista con El Heraldo de México, el escultor –quien este año celebra medio siglo de trayectoria artística– asegura que la pieza no presentó mayores daños, y después de una revisión de toda su estructura, se decidió atender sólo la capa de pintura con aparente óxido.Es la cabeza de un caballo, construida con placas de acero, recubierta con esmalte de acrílico y mide 28 metros.[3]

Anécdotas geniales[editar | editar código]

Referencias[editar | editar código]

  1. Tomado de: http://cdmxtravel.com/es/lugares/escultura-el-caballito-de-sebastian.html
  2. Tomado de: https://mas-mexico.com.mx/monumentos-mexicanos-el-ingenioso-caballito-de-reforma/
  3. Tomado de: https://heraldodemexico.com.mx/artes/el-caballito-siempre-sera-amarillo-reforma-escultura/