El Moro

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El Moro es un edificio sede de la Lotería Nacional, es una de las construcciones más emblemáticas del siglo XX. Fue inaugurada en 1945 y en ella se dio la Primera Transmisión Comercial de Televisión con el cuarto Informe de Gobierno del presidente Miguel Aleman. Se encuentra en la Colonia Tabacalera en la Alcaldía Cuauhtémoc y es conocido como El moro debido a que su estructura recordaba una tienda morisca. Además de ser uno de los inmuebles con mayor expresión de Art Decó en la Ciudad de México fue el primero en implementar el sistema de Floración elástica, lo que lo convertía en un edificio muy particular para su época.

Datos

Época
Siglo XX / 1853

El Moro

El Moro

Alcaldía
Colonia
Dirección
Plaza de la Reforma No. 1 Edif. Moro, Col. Tabacalera C.P. 06037 México
Coordenadas
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Descripción[editar | editar código]

El edificio de la Lotería Nacional se ubica en el lugar que ocupó durante muchos años una plaza de toros que fue demolida y en su lugar se construyó la enorme mansión de don Ignacio de la Torre y Mier, casado con Amada Díaz, una de las hijas de Porfirio Díaz.

Lotería Nacional

Se encuentra hacia el norte de la glorieta conocida como “el caballito”, en virtud de que ahí se ubicó, desde 1853 hasta 1979, la famosa escultura ecuestre de Carlos IV, obra del valenciano Manuel Tolsá, hoy reubicada en la Plaza “Manuel Tolsá”.

El sitio era de especial importancia porque a partir de ese punto iniciaba el Paseo de la Reforma hacia Chapultepec. Por otro lado, también era el inicio del famoso paseo de Bucareli, que fuera tan importante durante la última etapa de la época virreinal.

La Lotería Nacional para la Asistencia Pública es una institución de gran tradición en México que data de 1771, cuando se llevó a cabo el primer sorteo de la Real Lotería General de la Nueva España.[1]

Historia[editar | editar código]

Siglo XX

El Moro, edificio de la Lotería Nacional para la Asistencia Pública fue proyectado por el arquitecto Manuel Ortiz Monasterio en colaboración con Bernardo Calderón y Luis Ávila. El proyecto de la fachada fue resultado de un concurso; mientras que el arquitecto Vicente Mendiola diseñó los interiores del vestíbulo y el salón de sorteos; y innovadora cimentación estuvo a cargo del ingeniero José Antonio Cuevas.[2]

Ese proyecto se imprimía como membrete en el papel de la Lotería, por eso los trabajadores le llamaron al edificio El Moro, porque parecía una tienda morisca. Finalmente se aprobó el proyecto de un edificio de 20 pisos y dos sótanos.

El entonces presidente de la república Lázaro Cárdenas aprobó, excepcionalmente, la altura del edificio, aprobando una mayor altura de lo autorizado en la ley vigente de construcción de la época de la década de 1930, también en esa década se inició un estudio detallado de la vulnerabilidad sísmica a la que sería sometida el edificio cuando se enfrentase a un terremoto.

La cimentación comenzó en el año 1934, y debido a que durante las primeras excavaciones se encontró que el exceso de agua en el subsuelo ocasionaba una elevación en el terreno, Cuevas proyectó el inicio de un nuevo sistema de cimentación, al que llamó “Sistema de Flotación Elástica”, una gran obra de ingeniería que destacó en el mundo por su atrev

Lotería Nacional y Estatua Ecuestre

imiento y originalidad.

El “Sistema de Flotación Elástica” permitió a Cuevas realizar un nuevo proyecto, que fue autorizado con un piso subterráneo, entrepiso, planta baja y diecisiete pisos superiores. El programa de edificación continuó en forma paralela a los estudios científicos y técnicos, los cuales permitieron el sostenimiento del edificio; sin embargo, se presentaron infinidad de retrasos cuando se llevaban a cabo las pruebas y verificaciones sobre la seguridad de la obra.

En 1942 se inició el montaje de estructuras de madera y hierro para la cimbra de la bóveda del Salón principal, se compraron los elevadores y se acondicionó el Salón de Sorteos. La área total del edificio es de: 22,000 metros cuadrados en un predio de más de dos mil metros cuadrados que antes ocupaban casonas de la época del Porfiriato, que para ser exactos se adquirió la comandancia de policía que estaba junto a la casa de Mier y Terán, la casona donde se ubicaron también las oficinas de la Lotería Nacional y tres predios más.[3]

El edificio es estilo art déco es conocido como El Moro porque parecía una tienda morisca. Se considera uno de los primeros rascacielos de la ciudad de México, consta de 22 pisos y una altura de 107 metros. Fue inaugurado en 1945. En su interior alberga a la Lotería Nacional.

En aquel momento, esta elegante edificación, considerada como el primer rascacielos de la ciudad, albergó en su cúpula la antena de la Empresa de Televisión de México (Canal 4), la cual permaneció ahí diez años, hasta ser transportada a su propio edificio, en Avenida Chapultepec.

Desde este edificio se transmitió la primera señal de televisión en México el 1º de septiembre de 1950, con el cuarto informe de gobierno del presidente Miguel Alemán.

Con la emigración de la televisora el Edificio “Moro” sufrió su primera remodelación. Posteriormente, en 1978, fue sometido a una segunda intervención, con la que perdió detalles de su fachada original.

En una tercera intervención, que se llevó a cabo en la década de los 90, el rascacielos fue intervenido para adaptarse a los modernos edificios de la Avenida Paseo de la Reforma. La remodelación provocó que la elegancia y sofisticación, características de su diseño, fueran sustituidas por fachadas de cristal espejo, lo que produjo un gran contraste con el concepto arquitectónico de su magnífico interior.[3]

*Edificio Moro, sede de la Lotería Nacional.

Siglo XXI

Finalmente el Edificio “Moro” fue sometido a una cuarta remodelación, sin duda la más importante de su historia, no solo porque se realizó en el marco del Bicentenario de la Independencia y Centenario de la Revolución Mexicana, sino porque recuperó su fachada original, con su histórico estilo art decó. Los trabajos de restauración que se realizaron en la fachada del edificio, han descubierto el uso de Stream Line, uno de los grandes aciertos del art decó, que predominó en el proyecto original.

Lotería Nacional

Época Colonial

La Lotería Nacional tiene su origen en la época colonial, cuando el Rey Carlos III de España expide en abril de 1769 por mandato real, el que se implante de manera oficial la lotería en la Nueva España, denominándosele "Real Lotería General de la Nueva España"; su reglamento se emitió en 1770 y el primer sorteo se celebró el 13 de mayo de 1771 por un monto de 84,000 pesos.[4]

Los billetes podían comprarse en cuartos, medios y enteros, por $1, $2 y $4 pesos respectivamente; esto con el objetivo de que incluso las personas de escasos recursos tuvieran la oportunidad de participar en ella. Pero no fue sino hasta 1781 que se hizo la primera donación a la beneficencia, destinada al Hospicio de Pobres.[5]

En la antigua calle de Capuchinas, hoy Venustiano Carranza, se ubicó en 1769 la primera ‘colecturía’, que era el sitio donde anteriormente se vendían los billetes de lotería.

Siglo XIX

Loteria-reforma.jpg

Durante la guerra de independencia, la Lotería tuvo una importancia fundamental: captar fondos para costear la defensa colonial. De esta forma, se amplió el alcance territorial de la Lotería creándose una para cada estado, que en ese entonces eran ‘intendencias’, división administrativa vigente durante el virreinato.

La Lotería Nacional ha tenido numerosos nombres: recién consumada la independencia, Agustín de Iturbide la llamó ‘Dirección General de Renta de Lotería del Imperio de México’; en 1843 se fusionó con la Academia de San Carlos, por lo que la Lotería adoptó el nombre de esta institución; durante la administración de Benito Juárez, fue renombrada como Lotería Nacional y sus fondos fueron destinados a la construcción del Ferrocarril de México.

Ocupó las instalaciones de la Academia de San Carlos y más tarde, antes de establecerse en su sitio actual, el Kiosco Morisco fue sede provisional de algunos sorteos de la Lotería Nacional durante su permanencia en la Alameda Central hasta 1908, fecha en que la Lotería se instaló en la calle de Donceles.[5]

Siglo XX

En 1915 Venustiano Carranza decidió suspender la Lotería Nacional, pues en ese momento de la Revolución su lucha contra Pancho Villa y Emiliano Zapata se hallaba en un punto crítico. Aquella fue la primera y única ocasión en la que los sorteos fueron interrumpidos. Tras un breve periodo de cinco años, la Lotería Nacional sería restablecida por uno de los muchos presidentes del caótico México pos revolucionario, Adolfo de la Huerta.

Finalmente, el 16 de agosto de 1920 (tras 5 años de suspensión) es bautizada con su actual nombre: ‘Lotería Nacional para la Asistencia Pública’ (LOTENAL), que obtuvo grado constitucional en 1940.

En 1925 se trasladó a una casona en Paseo de la Reforma (perteneciente a la familia de Porfirio Díaz), que fue demolida ocho años después para iniciarse la construcción de la actual sede de la Lotería Nacional: “El Moro”, edificio inaugurado en 1946.[5]

El último predio en el que se ubicó La Lotería perteneció a Ignacio Torre y Mier, esposo de Amada Díaz, hija de Porfirio Díaz; en Reforma 1. En 1933 se iniciaron las obras de un edificio realizado ex profeso para la Lotería, por lo que se adquirieron 4 predios colindantes, incluida una comandancia de policía.

Arquitectura[editar | editar código]

El actual edificio sede, de estilo art decó, obra del ingeniero José Antonio Cuevas, fue el primero que se construyó por medio de un procedimiento de flotación elástica y en donde se aplicó el criterio de compensación de cargas para su cimentación; fue en su época el edificio más alto y el mejor preparado para resistir sismos. Fue inaugurado el 28 de noviembre de 1946.

Su interior responde a la arquitectura funcionalista contemporánea, pues cuenta con espacios libres que pueden ser subdivididos según las necesidades de la institución. Destaca el amplio salón de sorteos cuyas puertas están abiertas al público que quiera presenciarlos. A finales del siglo XX su fachada fue modificada con cristal, que se retiró en el 2010 para recuperar la imagen original.

En el primer piso, en donde actualmente está el espacio para usos múltiples, el artista Ariosto Otero realizó el mural El Juego de la Fortuna. En la fachada principal se colocaron dos relieves art decó alusivos a la fortuna, a la riqueza y a la Lotería Nacional.[1]

Referencias[editar | editar código]

  1. 1,0 1,1 Tomado de: Javier Villalobos Jaramillo. Los 100 Sitios y Monumentos más importantes del Centro Histórico de la Ciudad de México. En coordinación con la Delegación Cuauhtémoc y el Gobierno de la Ciudad de México
  2. Tomado de: https://frontonmexico.com.mx/el-moro-edificio-la-loteria-nacional/
  3. 3,0 3,1 Tomado de: https://acerobsv.com/blog/edificio-loteria-nacional.html
  4. Tomado de: http://www.trabajo.com.mx/fundacion_e_historia_de_la_loteria_nacional.htm
  5. 5,0 5,1 5,2 Tomado de: https://mas-mexico.com.mx/historia-de-la-loteria-nacional-algunos-datos-curiosos/